UN EPISODIO DEL MOVIMIENTO COMUNAL
Por: Raymundo Flores Melo*
Los comuneros organizados de Milpa Alta en pos de la conservación de sus tierras, tuvieron como eje prioritario la lucha contra la tala de su bosque auspiciada por el entonces representante comunal general, Daniel Chícharo Aguilar, así como la confirmación y titulación de sus montes. Las detenciones de carros cargados de leña realizadas por los campesinos milpaltenses fueron una de las acciones de defensa, sin embargo, las autoridades pasaban una y otra vez por alto el origen del problema: la anacrónica y ambiciosa representación comunal.
Tras las movilizaciones, la Secretaría de la Reforma Agraria se vio obligada a sacar una convocatoria para elegir a un nuevo representante comunal pero esto no le pareció bien a Daniel Chícharo y, haciendo valer su cargo y confabulado con autoridades locales y federales, hizo revocar la convocatoria y lanzar una nueva acorde a sus intereses. La reunión a la que llamaba el nuevo documento tendría efecto el día domingo 27 de julio de 1980.
El trabajo de los Comuneros Organizados de Milpa Alta para tener una representación que defendiera los intereses de la comunidad se venía abajo ante la mirada impasible de funcionarios. Pero lo peor era que esta nueva andanada los encontraba fracturados y confrontados. Pese a ello, en los subsiguientes hechos participaron todos los grupos de comuneros.
La elección había sido preparada de antemano por Chícharo Aguilar y el delegado Navarro González. Ese día por la mañana en un predio que se encuentra en la calle Jalisco casi esquina con Aguascalientes en el barrio de San Mateo, el asesor del Regente1, Manuel Arrieta, coordinaba a los diferentes funcionarios agrarios que iban, en cada pueblo comunero, a celebrar las asambleas; en tanto, dentro del Salón Santa Cruz, en el barrio del mismo nombre, otras autoridades de la Secretaría de la Reforma Agraria junto con Daniel Chícharo intentaban dar inicio a la correspondiente a Villa Milpa Alta. Su consigna era elegir al doctor Acevedo como representante comunal. El doctor Jesús Acevedo Molina fue delegado de Milpa Alta entre 1951 y 1955, hasta ese entonces había sido el único milpaltense en ocupar dicho cargo.
Los comuneros, sin la presencia de Aquiles Vargas, al enterarse de la maniobra se dirigen, unos, al barrio de San Mateo, y otros, al Salón Santa Cruz para tratar de impedir que el mismo grupo de talamontes se quedara con la representación comunal. El primero de los grupos logra hablar con el que se suponían era un funcionario importante de la Reforma Agraria, lo hacen salir de su centro de operaciones y, junto con otros dos funcionarios, los encaminan rumbo al poblado de San Lorenzo Tlacoyucan.
En esta misma acción, en la calle Jalisco, un grupo de mujeres, en donde sobresalían las de Villa Milpa Alta y San Lorenzo Tlacoyucan, aún a costa de su integridad física se enfrentaron a los granaderos para cubrir la retirada de los comuneros que llevaban a los funcionarios. Era tanto el arrojo y coraje que una de las mujeres, de una sola pedrada, rompe en dos el casco de un granadero dejándolo descalabrado. Los funcionarios suben caminando a San Lorenzo, pueblo de lo más aguerrido en la defensa de su propiedad, donde son retenidos por la comunidad.
Pasadas las once de la mañana, el representante de la Reforma Agraria daba por iniciada la asamblea dentro del antes mencionado salón, resguardado – en las calles de Tabasco y Yucatán – por el cuerpo de granaderos y un numeroso grupo de golpeadores, cuando uno de los comuneros, sin medir las consecuencias de su acto, arranca de las manos del funcionario los documentos que servían de base para desahogar cada uno de los puntos de la convocatoria.
Ante esta acción los chicharistas2 empiezan la persecución pero el integrante del movimiento comunal es protegido por los milpaltenses que estaban intentando participar en la asamblea. Los golpeadores a sueldo, hombres y mujeres ajenos a la comunidad entraron en acción. Una de las mujeres que salvaguardó al osado comunero fue golpeada en el rostro con una varilla. Este hecho hizo que los ánimos se caldearan y que la gente respondiera a la violencia con violencia. Los comuneros milpaltenses estaban tan enardecidos que los propios granaderos, que debían ser la protección de la asamblea y de las autoridades, casi no metieron las manos pese a que de su parte hubo varios descalabrados pues los comuneros y comuneras les arrojaron tabicones de una construcción cercana.
Fue tanto el ímpetu de la gente reunida que Daniel Chícharo y algunos de sus seguidores fueron arrinconados en un pequeño cuarto al fondo del Salón Santa Cruz3 y posteriormente obligados a salir, arrojándoles estopas con gasolina encendida, para después ser golpeados por la concurrencia. La peor parte se la llevó el hasta entonces Representante Comunal General quien fue golpeado con palos, piedras y varillas. Eran tantas las vejaciones que los campesinos milpaltenses habían sufrido en manos de Daniel Chícharo que “Fuenteovejuna” le cobró las afrentas por mucho tiempo guardadas, pues hay que recordar que Daniel Chícharo estuvo ostentando el cargo de representante comunal general por poco más de13 años. Cuando es electo representante comunal fue tal la desconfianza que generó en las personas que tenían bajo resguardo la documentación de la propiedad comunal de Milpa Alta que estas se negaron a entregárselas.
Los comuneros milpaltenses agredidos por Daniel Chícharo fueron varios pero solo algunos se atrevieron a levantar un acta ante el Ministerio Público de la localidad. Para tener una idea la magnitud de la violencia ejercida por este individuo y su gente baste revisar las averiguaciones previas 38ª/281/979, 29ª/162/979, 29ª/265/979, 29a/128/979 y 29ª/243/979, todas ellas presentadas en el año de 1979 en Milpa Alta.
Los diferentes partes médicos dicen que el sujeto arriba mencionado recibió quemaduras de primero, segundo y tercer grado en más del 45% del cuerpo. El profesor Daniel Arturo Medina Aguilar4, de 38 años de edad, fue golpeado, roseado de gasolina y una mano arrojo un cerillo encendido que lo convirtió en una tea humana. Posiblemente victima del pánico busca protección en una casa vecina en donde logran apagarlo. Posteriormente es trasladado al Hospital Regional de la demarcación para luego ser internado en el Hospital 20 de Noviembre del ISSSTE en donde fallece a los tres días, el 30 de julio a las 23 horas. El resultado de la autopsia fue que la persona antes citada “falleció de Bronconeumonía complicación determinada por el conjunto de quemaduras y traumatismo cráneo encefálico…”5
El caso de este linchamiento tumultuario es seguido por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal(PGJDF), muchos vecinos del barrio de la Concepción y del poblado de San Lorenzo Tlacoyucan son acusados de haber participado en los hechos del 27 de julio de 1980, sin embargo, dos comuneros de Villa Milpa Alta fueron detenido como presuntos responsables. Detención y encarcelamiento injustos, pues uno de ellos no estuvo presente en los acontecimientos, en tanto, que el otro únicamente observó los sucesos a lo lejos. Tiempo después se giraron órdenes de aprehensión contra el profesor Raymundo Flores Aguilar y doña Herminia Gutiérrez Valencia. Dichas órdenes, hicieron salir de Milpa Alta al primero y no salir de su pueblo a la segunda, pues el carácter indómito de San Lorenzo Tlacoyucan no permitía la entrada de patrullas ni de algún vehículo extraño.
El que se girara acción penal sólo contra uno de los grupos de comuneros, mientras que el otro, encabezado por Aquiles Vargas, no se le obsequiara con órdenes de aprensión resulta un tanto sospechoso, máxime si se toma en cuenta de que tanto el profesor Vargas y varias gentes cercanas a su círculo fueron mencionadas por los declarantes en el proceso 183/981 como actores materiales de golpes e incitación a la violencia contra Daniel Chícharo Aguilar.
rayflome@gmail.com
Integrante del Consejo de la Crónica de Milpa Alta
y vecino del Barrio de la Concepción.
Integrante del Consejo de la Crónica de Milpa Alta
y vecino del Barrio de la Concepción.
1 En ese entonces el regente de la Ciudad de México era el profesor Carlos Hank González.
2 Con este nombre se conoció a los seguidores e incondicionales del profesor Daniel Chícharo.
3 El nombre de dicho salón es “Cuauhtémoc” pero es más conocido por “Santa Cruz” por encontrarse casi frente a la iglesia del barrio del mismo nombre.
4 Con ese nombre fue reconocido en la morgue por su esposa y otros conocidos.
5 Proceso 183/981 en la PGJDF
